. Entre tantos reformismos a la teoría revolucionaria, se advierte que la salvación del perredismo radica en los orígenes de la teoría de izquierda, la misma con la cual se desarrolló a lo largo del siglo XX: el marxismo – leninismo. Y con razón, cuando dicta que la historia de la humanidad, es la historia de la lucha de clases. Si el PRD quiere reformarse, deberá colocarse a la vanguardia de la lucha de clases en México
Por Luis Alberto Rodríguez / Desde Abajo
Desde hace años, el Partido de la Revolución Democrática es rehén de los intereses traidores de quienes hoy detentan su aparato. Sin embargo, esto no es culpa del PRD por sí mismo. Por eso hay que refundarlo. Esta es la premisa que más de 500 perredistas aprobaron el miércoles 15 en Ixmiquilpan, con Alejandro Encinas como figura representativa.
1.- Nos guste o no, el PRD es el partido político más importante que la izquierda mexicana ha construido. Desde 1919, emergiendo del registro del Partido Comunista Mexicano, del Partido Socialista Unificado de México y del Partido Mexicano Socialista, la lucha por la democracia en este país ha recorrido sus filas por en medio, hasta la actualidad. Por eso, de su recomposición dependerá en buena medida la transformación del país, como ha sucedido antes.
2.-Hay oportunidades históricas que sólo se presentan una vez y suelen ser la diferencia entre la muerte y la victoria. Esta es una de ellas. Hoy más que nunca, aún más que en años anteriores, es fundamental salvar al PRD. Las razones pasan por la historia, lo cultural y la posibilidad de contar con una herramienta legal de oposición. Sin embargo, su fortalecimiento no depende únicamente de quitar a unos para ponerse otros. La primera Revolución Democrática tiene que ser al interior del partido.
En efecto, los revisionistas, los reformistas se tienen que ir del PRD. Los infantilistas; los que se dicen moderados cuando, en realidad, no son más que mercaderes que venden y compran con la sangre de los miles de camaradas que a lo largo de 80 años han sido perseguidos, encarcelados o asesinados por la causa del partido. A los traidores se les llama enemigos. Nueva Izquierda y sus aliados se tienen que ir del PRD. Ahora, lo de fondo sería: Los que se quedan, los auténticos ¿a qué se quedan?.
3.- Deberán consolidar un partido político que trascienda de lo meramente electoral, hacia la conformación de una estructura verdaderamente revolucionaria, vinculada estrechamente a lo más valioso de la izquierda mexicana e internacional. Establecer una política de alianzas con la ciudadanía consciente y rebelde, con las organizaciones, con los movimientos sociales, culturales y políticos que en este momento están transformando la nación, muchas veces, desde la oscuridad represiva del Estado. Apoyarlos, ofrecerles su estructura y movilizarse con ellos. Hacer suyas sus causas y no descansar hasta obtener la victoria final. Un partido revolucionario y democrático debe exigir la libertad de los presos políticos, la presentación de los desaparecidos y castigo a los culpables. Necesita acoger los ánimos revolucionarios del pueblo.
4.-Alejandro Encinas lo puso sobre la mesa durante su campaña por la presidencia nacional del partido: “Es posible un PRD combativo, democrático y socialista”. Entre tantos reformismos a la teoría revolucionaria, se advierte que la salvación del perredismo radica en los orígenes de la teoría de izquierda, la misma con la cual se desarrolló a lo largo del siglo XX: el marxismo – leninismo. Y con razón, cuando dicta que la historia de la humanidad, es la historia de la lucha de clases. Si el PRD quiere reformarse, deberá colocarse a la vanguardia de la lucha de clases en México. Siendo un partido que posea teoría revolucionaria, conocimiento de la historia y comprensión profunda del movimiento práctico (Mao TseTung. Obras Escogidas, t. II., Octubre de 1938). Así sí gana la gente.
5.-El PRD no necesita pactos de no agresión. Creerlo sería llenar la memoria de tonterías. Lo que está en juego es este México empobrecido y violento. Sólo es cuestión de observar a donde lo ha llevado la unidad simulada. Por eso, por el contrario, la ruta de la refundación del PRD deberá conducir al centralismo democrático.
Sobre estos valores combatieron y combaten muchos maestros militantes como Valentín Campa, Demetrio Vallejo, Heberto Castillo, Arnoldo Martínez Verdugo, Hernán Laborde, Sara Lovera y el propio Alejandro Encinas. Así mismo lo hicieron los cientos de muertos por esta causa; tan solo 600 durante el Salinismo (tres en Jacala, Hidalgo perpetrados por gatilleros del hoy senador José Guadarrama Márquez, según la recomendación de la CNDH 075/1991) y 13 más en Guerrero el cinco de julio pasado. No ser consecuentes con esta oportunidad histórica, sería matarlos dos veces.
LLEGÓ POR CORREO. De Itzcóatl Martínez: Muy buen texto Patria, Huazalingo o muerte, mi nombre Itzcóatl nacido en Tlamamala, Huazalingo, Hidalgo y radico en Cd Victoria por cuestiones de estudio. Hace tiempo que no iba a mi pueblo y cuando fui encontré que todo el municipio se encontraba en un ambiente de alta tensión por las próximas elecciones. Solo escucha decir a mis hermanos sobre cómo iban las cosas por allá, no pensé que sería algo tan serio el pueblo como lo dice en su párrafo estaba levantado en armas, y con la mente abierta (PRD) yo viaje solo a eso a depositar el voto en favor del cambio y valió la pena. Muchas felicidades por su página.
luis@desdeabajo.org.mx