Hacer negocio con Emiliano Zapata

Este jueves ocho de agosto, cuando se cumplen ciento cuarenta años del nacimiento del General Emiliano Zapata Salazar, varias corporaciones campesinas han cerrado los principales accesos a la zona metropolitana del Valle de México y han montado manifestaciones en las representaciones del Gobierno, exigiendo que se les asigne dinero so pretexto de afectar la producción agrícola. Protestan porque quieren que el Gobierno de México les devuelva los recursos que se les quitó en el presupuesto de egresos de este año, con lo cual se mantenían y sus líderes se han hecho prácticamente millonarios. Corporaciones –que no organizaciones–, como la CODUC, UNTA, Antorcha Campesina, el Frente Francisco Villa y tantas otras mas que se han escudado en la lucha agrarista para rajar la bolsa del erario y no producir ni un kilo de maíz. Cada fin de año se montaban frente a las oficinas de la Sagarpa, de la Sedesol o de la Secretaría de Gobernación para negociar sus montos. A cambio, actuaban como grupos de choque contra verdaderas organizaciones campesinas e indígenas que no pertenecen a ningún partido político. Por ejemplo, es larga la historia de operaciones sangrientas de la CNC o Antorcha Campesina en la Huasteca contra las comunidades autónomas. Y fueron estas corporaciones las que en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari apoyaron la reforma al artículo 27 constitucional, la cual disolvió los Ejidos para fraccionar la tierra y fuera vendida a los monopolios agro-industriales o a inmobiliarias. De modo que no vengan con el cuanto de «Zapata vive». La administración de López Obrador hizo bien en cerrarles la llave del erario y hacer que el dinero baje directo a las familias campesinas, sin intermediarios.