La discordia entre el grupo Sosa y la base de Morena escaló otro nivel, luego de que –no sé quién–, impuso a Alejandro Olvera Mota, esposo de la diputada sosista Roxana Montealegre Salvador, como representante de Regeneración Nacional ante el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo. Es Olvera Mota uno de los alfiles electorales del grupo político propiedad del presidente del patronato de la Universidad Autónoma de Hidalgo, Gerardo Sosa Castelán. Lo fue cuando el sosismo era priísta, luego panista, luego fue un breve tiempo encargado del extinto Partido Socialdemócrata, lo fue cuando se pasaron al Movimiento Ciudadano, ahora en Morena y, entre tiempos, funcionario de la UAEH. Ya por su desprestigiada carrera como saltimbanqui, por la división entre quienes son del grupo universidad y quienes no en ese partido, o porque de plano en Morena no quieren cederle más espacios al club de Gerardo Sosa, ni bien se supo que Olvera Mota llegó al IEEH, las bases morenistas protestaron. De tal modo, el secretario de organización de Morena en Hidalgo, Luis Enrique Cadena García, intentó enfriar los reclamos y de tajo contestó a sus compañeros: “no se preocupen lo vamos a quitar”. Quizá lo quiten, quizá no. El hecho es que la relación entre Morena y el grupo Sosa está más que quebrada. Esto pudo ser un divorcio en buenos términos pero, tal parece, se disputarán hasta las cazuelas.
Nuevo pleito Sosa-Morena: el IEEH
