La campaña «Abrimos o morimos» impulsada por el sector restaurantero en Pachuca se vivió de esta manera. Algunas decenas de cacerolazos se han visto en la capital de Hidalgo por parte de este sector, como forma de protesta ante las medidas sanitarias que les obligan a cerrar sus negocios para impedir la propagación del COVID-19.
Sin embargo, el sector ha desafiado las imposiciones del Gobierno del Estado al emitir comunicados donde rechazan el cierre de sus locales.
De acuerdo con la Cámara de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (CANIRAC), más de 90 mil restaurantes han cerrado en México por la crisis originada por la pandemia. Estima que uno de cada cuatro establecimientos ha cerrado definitivamente mientras que el resto está en suspensión o cambiará de dueño.
El gobierno de Hidalgo decretó emergencia sanitaria en 33 municipios del Estado, clausurando servicios en bares y restaurantes. Por su parte, la CANIRAC exige que se les permita laborar al 20 % de su capacidad.
Te presentamos las fotos de los cacerolazos vividos en Pachuca.