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jueves, marzo 28, 2024

Opinión: Inicia el debate sobre la reforma energética

. Evidentemente el problema no es PEMEX, sino la política energética y fiscal la que lo está ahorcando, sumado a los problemas de corrupción de los funcionarios en turno y del propio sindicato (no olvidemos el pemexgate).

Por Otilia G. Sánchez Castillo / Desde Abajo

El pasado 8 de mayo (aniversario del nacimiento de Don Miguel Hidalgo y Costilla), se realizó la instalación de los “Foros de Debates sobre la Reforma Energética”, convocado por la Comisión de Energía y la Comisión de Estudios Legislativos del Senado de la República.

En esta sesión se invitaron a la Secretaria de Energía, Director General de Petróleos Mexicanos, a los directores generales de Pemex Exploración y Producción, Pemex Refinación, presidente de la Comisión Reguladora de Energía, al presidente del Instituto Mexicano del Petróleo, entre otros funcionarios, con el objetivo de fundamentar la propuesta de reforma energética presentada por Calderón.

El discurso de las autoridades antes mencionadas evidentemente confirma lo que ya había sido presentado en las 5 iniciativas presentadas al Senado por Calderón: fortalecer a PEMEX es indispensable para garantizar la seguridad energética; también es indispensable fortalecer la rectoría del Estado.

Esta propuesta calderonista considera, entre otros aspectos que ya he ido mencionando en el análisis de la misma, ampliar las atribuciones de la Secretaría de Energía y de la Comisión Reguladora de Energía, además de crear la Comisión del Petróleo que funcionaría como el brazo técnico de la dependencia en materia de exploración y explotación.

Para ello se propone modificar el artículo 33 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, principalmente adicionando 10 atribuciones a las ya existentes de la Secretaría de Energía. Lo más delicado de estas atribuciones es que la Secretaría de Energía podría otorgar y revocar a Petróleos Mexicanos las asignaciones de áreas de exploración, explotación petrolera, tratando a Pemex como a cualquier empresa privada, violentando lo establecido en la Constitución, en el sentido de que el sector público tendrá a su cargo, de manera exclusiva, las áreas estratégicas que se señalan en el Artículo 28, párrafo cuarto de la Constitución, y que como he señalado en artículos anteriores, considera al petróleo y los demás hidrocarburos y a la petroquímica básica. Con esto queda evidenciado que ya no existiría el monopolio legal o natural del estado sobre esta área estratégica, establecido en el Artículo 28 constitucional.

Así mismo, para que la Secretaría de Energía pueda realizar todas las atribuciones que se pretenden en la propuesta, se propone crear la Comisión del Petróleo, como un órgano desconcentrado de esa dependencia, con autonomía técnica y operativa; nada que ver con Petróleos Mexicanos, excepto para requerirle la información necesaria para el desarrollo de las funciones de la Comisión.

Esta Comisión emitiría y supervisaría la aplicación de la normatividad técnica en las operaciones de exploración y explotación de hidrocarburos, además de que otorgaría y revocaría “los permisos para la ejecución, funcionamiento y desmantelamiento de obras y trabajos relacionados” con dichas operaciones.

Con respecto a las modificaciones que se proponen realizar a Ley de la Comisión Reguladora de Energía, éstas están relacionadas principalmente con las nuevas atribuciones de esta Comisión, a partir de la apertura a los capitales privados, nacionales y extranjeros, tanto para las actividades de transporte, almacenamiento y distribución de petrolíferos y petroquímicos básicos, como para las ventas de primera mano de los productos que se obtengan de la refinación del petróleo, de gas y de los petroquímicos básicos. Sin embargo, como lo establece el artículo 3º de esta Iniciativa, los términos y condiciones para dichas ventas, quedan fuera de las atribuciones de esta Comisión, “en cuanto existan condiciones de competencia efectiva a juicio de la Comisión Federal de Competencia, o que sean establecidos por el Ejecutivo Federal mediante Acuerdo”.

A pesar de que el artículo 4º, párrafo 4º de la Iniciativa de Reforma de la Ley Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional en el Ramo del Petróleo considera que el capital privado puede ser dueño de los ductos, instalaciones y equipos para realizar las actividades de transporte, almacenamiento y distribución de gas, de los productos que se obtengan de la refinación del petróleo y de petroquímicos básicos, y para realizar la refinación de petróleo, en la Iniciativa de Reforma de la Ley Reguladora de Energía, se sigue considerando la declaratoria de utilidad pública para el tendido de dichos ductos y construcciones en predios de propiedad pública, social y privada, cuando en la legislación vigente el estado es el único dueño de dichos ductos e instalaciones.

Una última reflexión, de acuerdo con la información presentada por diversos senadores en la sesión de instalación de los foros de debate, en 2007 Petróleos Mexicanos pagó 676 mil millones de pesos de impuestos y derechos a la federación, que equivale al 60{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de los recursos de Pemex. Esto representó el 11{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} del Producto Interno Bruto, y constituye el 40{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} del presupuesto federal. De sus 62 plantas de proceso petroquímico, hoy operan 14 normalmente y 18 están trabajando a baja carga por falta de materia prima; de los 220 equipos de perforación en PEMEX sólo quedan 30; las refinerías han dejado de producir gasolinas y durante 20 años no se ha construído ninguna nueva refinería; sus plantas de producción de amoniaco se encuentran paralizadas, por lo que México tiene que importar fertilizantes. Es decir, se ha dejado de apoyar la inversión que PEMEX requiere en ductos, petroquímica, refinería, exploración, explotación, mantenimiento, etc.

Esto ha obligado a PEMEX a comprometer su situación financiera a través de proyectos de impacto diferido en el registro del gasto (pidiregas), por un monto de 600 mil millones de pesos. En este año, en el presupuesto 2008, estamos pagando de intereses por los Pidiregas 80 mil millones, que es aproximadamente cuatro veces el presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de México. Estamos pagando esos intereses a un conjunto de inversionistas, cuyos nombres se desconocen aún en el propio Congreso de la Unión, lo cual tiene un enorme costo financiero.

Evidentemente el problema no es PEMEX, sino la política energética y fiscal la que lo está ahorcando, sumado a los problemas de corrupción de los funcionarios en turno y del propio sindicato (no olvidemos el pemexgate).

¿Por qué privatizar uno de los sectores estratégicos del país? ¿Acaso no existen otras opciones?

Para resolver estas dudas y más, se estarán realizando los foros de debate de la Reforma Energética del 13 de mayo al 22 de julio, en sesiones los martes y jueves. Pueden verlos en vivo a través del Canal del Congreso o escucharlos por la radio pública y privada. Así mismo pueden consultar la página del Senado: www.senado.gob.mx y expresar sus comentarios y propuestas a través de su buzón electrónico.

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