Ante la situación que se ha generado por las declaraciones de la Mtra. Teresa Ulloa Ziáurriz, Directora Regional de la Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés) ante la filmación de la película con la adaptación de la novela de Gabriel García Márquez, “Memorias de mis Putas Tristes”, en el Estado de Puebla, México, les hacemos llegar un boletín de prensa emitido por la CATWLAC en donde se informa de los hechos y de la demanda presentada.
En el Informe que presentó, el 12 de febrero de 2009, la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Crimen Organizado (UNDOC), basado en un estudio realizado en 155 países, la explotación sexual representa poco más del 79 por ciento de los casos de trata de personas en tanto que el trabajo forzoso es superior al 18 por ciento.
Más del 80 por ciento de las víctimas de trata son niñas y mujeres, señala la ONU. El reporte indica que de cada cinco seres humanos víctimas de trata uno es menor de edad y, “lo más preocupante”, es que son niñas y niños abusados y explotados sexualmente, víctimas de la pedofilia o la pornografía.
La Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés), conformada por cerca de 300 organizaciones no gubernamentales en 25 países de América Latina y el Caribe, informa que al tener conocimiento de que el Gobierno del estado de Puebla se disponía a filmar una película con la adaptación de la novela de Gabriel García Márquez, “Memorias de mis Putas Tristes”, presentó una Denuncia de Hechos, contra quién o quiénes resulten responsables, por hechos que pueden ser constitutivos del delito de Apología de la prostitución infantil y la corrupción de menores de edad, con base al Artículo 209 del Código Penal Federal, ya que éste artículo establece que quien, pudiendo hacerlo no impida el delito, será considerado co-partícipe del mismo, por lo que a partir del día de hoy, y debido a la secrecía que requiere la indagatoria, usaremos este medio para hacer las declaraciones a la prensa, en tanto que:
Llevada a la pantalla grande la historia de un anciano que decide darse una «noche de amor loco» con una adolescente drogada de 14 años, glorifica la pedofilia y la pederastía y al masificar el mensaje las naturaliza o normaliza y pone en grave riesgo a las mujeres y niñas de nuestros pueblos.
Al parecer, la obra del Premio Nobel de Literatura está siendo utilizada por Mario Marín para lavar sus pecados y convalidar sus antecedentes escandalosos en el caso del pederasta de Cancún, escándalo internacional que devino por la violación de los derechos humanos de la periodista Lydia Cacho por la publicación de su libro “Los Demonios de Edén”.
Nos gustaría que el arte literario de Gabriel García Márquez sirviera para la prevención de este delito y no para su glorificación y naturalización. Firmemente creemos que una cosa es mandar un mensaje de que la pedofilia y la pederastía son un delito y qué se debe hacer para prevenirlo y otra, muy distinta, es mandar un mensaje erotizado del sexo con niñas.
Con el propósito de visibilizar en el mundo la magnitud de este fenómeno, la Conferencia Mundial de la Coalición contra el Tráfico de Personas, en coordinación con la Conferencia de Mujeres en Dhaka (Bangladesh, 1999), estableció el 23 de septiembre como el Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Personas, fenómeno que para la Organización Internacional del Trabajo (OIT) es uno de los tres negocios más rentables para la delincuencia nacional y trasnacional, después del tráfico de drogas y de armas, alcanzando un beneficio para los delincuentes de hasta 32 mil millones de dólares al año.
Se considera trata de personas a “la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas recurriendo al uso de la fuerza u otras formas de coacción, el rapto, el fraude, el engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra con propósitos de explotación”.
Así, lo define el Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, especialmente Mujeres y Niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Trasnacional, conocido como “Protocolo de Palermo”, pues se aprobó en el año 2000 en esta ciudad.
En México, un país que por su cercanía con Estados Unidos lo convierte en zona que expulsa, atrae y es paso de migrantes, no hay datos oficiales sobre la dimensión de la trata de personas. No obstante, existen denuncias de organismos internacionales que han dado cuenta de su existencia.
En 2007, el relator especial de Naciones Unidas contra la Venta de Niños, la Explotación Sexual y la Pornografía Infantil, Juan Miguel Petit, señaló que en México cerca de 80 mil niñas y niños son víctimas del abuso con fines de pornografía y prostitución.
Según reportes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), anualmente 85 mil niñas y niños son utilizados en actos de pornografía en México, mientras que en 21 de las 32 entidades del país existe turismo sexual.
Responsable de la Publicación: Mta. Teresa C. Ulloa Ziáurriz, Directora Regional de la CATWLAC (AC PGR/FEVIMTRA/TRA/003/2009)