. Fernando Amezcua, secretario del Exterior del SME, afirma que más de 1 mil militares vestidos con los uniformes de la Policía Federal, han sitiado sus pobladores quienes han visto como decenas de casas fueron cateadas, sustraídos documentos, detenidos y golpeados varios electricistas.
Pachuca, Hgo., México (Agencia Desde Abajo).- Desde la madrugada del día de hoy 17 de marzo, la población de Juandhó, municipio de Tetepango, Hidalgo, está viviendo un escenario de terror, denunció Fernando Amezcua, secretario del Exterior del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).
Sitiados y prácticamente secuestrados por más de 1 mil militares vestidos con los uniformes de la Policía Federal, sus pobladores han visto como decenas de casas fueron cateadas, sustraídos documentos, detenidos y golpeados varios compañeros electricistas, entre los que destacan Diego Sánchez Mendoza, Sergio Mendoza Rivera y Adrian Monroy Mejía y del resto de la población civil, en la búsqueda de los camarada Pablo Esparza Flores Subsecretario General de la División de Juandhó y de Gregorio Paredes, Miembro de Nuestra Dirección Sindical, informó.
Amezcua enfatizó que los delitos que cometió el pueblo de Juandhó son” tener dignidad y haber parido entre sus hijos, a una buena cantidad de trabajadores miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas, que ayer decidió colocar banderas rojinegras de Huelga. Ello ha encendido el enfermizo odio de Felipe Calderón Hinojosa y sus tropas contra los trabajadores, pero lejos están de amedrentarnos, y menos aún de hacernos abandonar la lucha digna, que nuestro Sindicato ha decidido encabezar”.
Sobre esto, el dirigente electricista llamó a los organismos nacionales e internacionales de derechos humanos, a los dirigentes de las organizaciones sindicales, sociales y políticas, a los intelectuales y pueblo en general, les invitamos a visitar Juandhó, constatar de cerca este secuestro masivo de una población inerme, pero dispuesta a no dejarse intimidar y golpear, para movilizarnos e impedir que continué esta miserable política fascista de criminalización de la justa lucha social electricista.
“Responsabilizamos al gobierno de Calderón de la integridad física de todos nuestros camaradas y especialmente de los familiares de nuestro Secretario General Martín Esparza Flores, así como de las imprevisibles consecuencias que traerá esta política de terror hacia la población de nuestra hermana División Juandhó, la actuación de Calderón está llegando a límites intolerables”.
Además, lanzo una invitación a las organizaciones internacionales a movilizarse en protesta frente a las embajadas y consulados de México en sus respectivos países. “Debemos detener la mano fascista que peligrosamente se enseñorea en México”.