12.8 C
Hidalgo
jueves, noviembre 21, 2024

La FARC y la toma del poder – Entrevista Marco León Calarcá

No me parece lejano aquel octubre de 2013 cuando me reuní con Marco León Calarcá en La Habana, Cuba, a sólo unos meses de iniciados, públicamente, los diálogos entre la guerrilla de las FARC-EP y el gobierno de Colombia para la culminación del conflicto armado. Cuatro años después, la mesa de paz fructificó, nació la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) como el nuevo partido político de la izquierda colombiana y Calarcá, cuyo nombre es Luis Alberto Albán, compite para ser congresista por el departamento del Valle del Cauca, cuya capital es la ciudad de Cali. Lo busqué de nuevo porque mis preguntas han aumentado desde entonces y tenía que planteárselas.

Sentados en el lobby de un hotel habanero de aquel 2013, el entonces comandante del Bloque Caribe de las FARC-EP, me adelantaba que si la guerrilla se convertía en un partido político, no significaría que abandonarían la ruta revolucionaria ¿Qué piensa ahora? ¿Qué responde a los químicamente puros que critican este nuevo paso del movimiento fariano? ¿Cómo se siente en esta nueva etapa? El me respondió:

“El ánimo de exguerrilleros y exguerrilleras farianos es bueno, somos ahora combatientes por la paz. La paz sigue siendo anhelo del pueblo colombiano, del cual somos parte y aportamos a su construcción, nuestra convicción y el cumplimiento de los acuerdos en lo que nos corresponde.”

–¿Qué ha sido lo más complicado en esta transición?—le pregunto.

–Como todo cambio se presentan dificultades por las incomprensiones producto de análisis desenfocados por el radicalismo, de izquierda para los cuales siempre es insuficiente lo logrado y desde cómodas posiciones, pues no están metidos en la lucha, descalifican lo hecho. Y desde la derecha, al considerar que lo acordado es demasiado y se convalida el terrorismo que es como ellos llaman a la lucha revolucionaria.

“En medio de esas manifestaciones, está el camino de la construcción de paz al lado y hombro a hombro con las mayorías, eso es lo que hacemos en la actualidad.
El Acuerdo de Paz es una herramienta para incentivar la lucha social, política, económica y cultural.

“A esto le agregamos inconvenientes propios del incumplimiento por parte del Gobierno y el Estado de algunos puntos y aspectos del Acuerdo, lo cual entraba y siembra de dudas e inquietudes a la militancia de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, FARC y a las mayorías nacionales, pues se pone en riesgo el propio proceso. Sabemos que es la lucha social y política con la solidaridad internacional la que nos permitirá superar esos y otros obstáculos”.

Pienso en el genocidio de la Unión Patriótica de 1984, cuando las FARC pactaron con el presidente Belisario Betancourt y el Estado y bandas paramilitares asesinaron a más de tres mil militantes, incluido al candidato presidencial de la UP, Jaime Pardo Leal.

–¿Qué responder a quienes temen –y me incluyo–, se reedite la masacre de la Unión Patriótica?

–Los temores son válidos y justificados por lo sucedido, sin embargo con esa experiencia la lucha social y política de organizaciones y personalidades no permitirá reeditar esa dolorosa parte de la historia.

“De otro lado y con mucho peso e importancia está la solidaridad de pueblos y gobiernos del mundo con el proceso, como aporte a la paz de Nuestra América y del mundo.

“El Acuerdo contempla cláusulas de garantía de la seguridad individual, incluyen además de exguerrilleros y exguerrilleras a las comunidades y a quienes luchan por los derechos de las mayorías, esta es otra herramienta para desde la resistencia popular defender la vida.

“El dolor por los asesinatos es grande y nuestra solidaridad con sus familiares es concreta, pero no podemos ceder ante el terrorismo paramilitar.”

— ¿Qué responder a quienes han criticado la dejación de las armas, como vía revolucionaria?

–Esa afirmación nada tiene que ver con nosotros. Ni con nuestra práctica, ni con nuestra teoría.

“Nuestra decisión no significa avalar la tesis de condena a la lucha armada revolucionaria y mucho menos desconocer el legítimo derecho a la rebelión armada de los pueblos del mundo. No nos confundamos.

“Hicimos dejación de las armas producto del análisis de nuestra realidad y firmes al principio de la autodeterminación.

“Nunca, y ahora menos, creemos en la exportación o importación de modelos, en la transpolación de soluciones. Nuestra experiencia es libro abierto para los pueblos del mundo, pero no aconsejamos ni adoctrinamos.

“No renegamos de nuestro pasado de violencia revolucionaria, ni de la lucha armada”.

— ¿Qué expectativas tienen en esta elección por venir como partido político?

–Somos un partido con vocación de poder, consideramos que podemos obtener el respaldo de inmensos sectores de la población y en la medida que logremos explicar nuestras propuestas, que la gente en Colombia las conozca, ese respaldo crecerá.

— Gane quien gane y pierda quien pierda en la elección ¿de qué manera enfrentarán el nuevo periodo político que se avecina?

–Lo dicho, la construcción de la Paz pasa por la correcta y oportuna implementación del Acuerdo y esa construcción se base en la lucha social y política de los pobres de Colombia, de los del Común, porque eso somos y encarnamos la esperanza.

También, pienso en otro riesgo. En los últimos meses, más de 120 líderes que apoyan el proceso impulsado por la FARC o que forman parte de él, han sido asesinados. Además, continúan bajo prisión política más de 2 mil integrantes de la ex guerrilla por lo cual el acuerdo de paz sigue esperando su turno de implementarse por completo, al menos, por lo que toca al gobierno de Colombia.

— ¿Está en riesgo el proceso de paz, considerando la cantidad de presos políticos farianos que existen y los asesinatos perpetrados en últimas fechas?–, preguntó a Luis Alberto Albán.

–Más allá de los incumplimientos que nombras, el proceso entra en crisis por la falta de esfuerzo político del gobierno para buscar soluciones frente a las trabas y trampas que colocan los enemigos de la paz, la extrema derecha.

“Hemos logrado la libertad de las tres cuartas partes de los prisioneros, quienes aún continúan en las cárceles, por cuenta de las maturrangas jurídicas, también lograran su libertad. Es nuestro compromiso.

“El tema de la seguridad es exigencia urgente, el mundo debe expresar su repudio a los asesinatos, práctica desesperada de quienes se lucran de manera política y económica de la guerra”.

— ¿Cómo se posiciona el partido FARC ante las demás coaliciones de izquierda en este proceso electoral presidencial?

–No entiendo de cuales coaliciones de izquierda se habla, hasta ahora y pese a nuestros esfuerzos por generar las condiciones para un gobierno de amplia coalición que garantice la tranquila transición a la Paz, no se ha logrado concretar. Todos los sectores hablan de Unidad pero al momento de organizarla surgen múltiples inconvenientes. Esto no significa por ningún lado manifestación de desánimo, seguimos trabajando en la unidad de los sectores populares y sus legítimas expresiones políticas.

Comandante Marco León Calarcá, en campamento guerrillero. FOTO: Desde Abajo

Me despido de Luis Alberto Albán. Es extraño llamarle así y no Marco León Calarcá, como ya me había acostumbrado. A pesar de no revestir más el verde olivo, de buena manera, su condición de comandante, hoy comandante político, sigue intacta. Veremos cómo le va en los comicios y si logra ser elegido congresista por el Valle del Cauca. No obstante, si algo deja claro es que para él los anhelos son más grandes que las coyunturas; que la política es un instrumento y su causa es una Colombia con paz y justicia social.

Colombia elegirá nuevo presidente y nuevo Congreso en las elecciones del 27 mayo de 2018, a primera vuelta y el 17 de junio, en segunda. La FARC compite con Rodrigo Londoño Echeverri, conocido como Timoleón Jiménez “Timochenko”, máximo líder de la ex guerrilla, como su candidato a la Presidencia. Su segundo al mando y jefe de las negociaciones, Luciano Marín Arango, alias Iván Márquez, encabeza la lista al Senado.

Alberto Rodríguez Ángeles
Alberto Rodríguez Ángeleshttp://viejopunk.com/
Periodista y escritor. Premio Nacional de Periodismo en derechos humanos "Gilberto Rincón Gallardo" 2009. Doctor en Investigación y Creación Literaria por Casa Lamm.

Related Articles

Últimas