En los últimos días del mes de agosto de 1910, el fotógrafo pachuqueño José Bustamante Valdés captó una inigualable imagen del Reloj Monumental de Pachuca, que la noche del 15 de septiembre del mismo año, centenario de la Independencia, inauguró el gobernador del estado Pedro L. Rodríguez, acompañado, entre otros, del presidente municipal de Pachuca, José María Brito.
La inédita fotografía es poco conocida. Forma parte de la Latin American Colettión, de Nettie Lee Benson, resguardada en la Universidad de Austin, Texas. De gran calidad, permite su reproducción con nitidez. Por ello nos solazamos con la esplendorosa belleza arquitectónica, la brillante cúpula de pátina verdosa y la singular limpieza de los tres cuerpos de cantera blanca de Tezoantla.
La munificencia de los estilos dórico, jónico y corintio son dignos de admiración en esta magnífica estampa que, si la ampliamos, contemplaremos con éxtasis la belleza de las estatuas que adornan los cuatro costados de la Torre que representan los movimientos sociales que emanciparon a los mexicanos: el inicio de la guerra de Independencia; la culminación de once años de lucha contra el régimen monárquico español; la elevación de los derechos de igualdad y la extinción del dominio económico social y político del clero católico mediante la expedición y la caótica aplicación de las leyes de Reforma.
Majestuoso zócalo original
En la fotografía del primer cuerpo de la Torre y del bellísimo zócalo, puede apreciarse que aún falta el piso de la plaza que sería cubierta con baldosas de basalto. En la parte izquierda de la foto logramos distinguir a varios trabajadores que laboran en los prados y en los andadores. Dos personas están sentadas cómodamente en el zócalo de mármol negro belga al cual se accedía subiendo dos escalones. El espacio entre el piso de tierra con el pedestal es de alrededor de un metro, pues el borde llega a la cintura del viandante recargado en el basamento.
La riqueza del monumento encierra 109 años, tiempo durante el cual nuestros padres y abuelos y las sucesivas generaciones se han deleitado con la majestad del Reloj de Pachuca. Por su señorío en 2012 fue declarado monumento artístico de México con el decreto expedido por el presidente de la República, Felipe Calderón.
1991: Escalones de piedra volcánica
En esas once décadas los pachuqueños sentimos orgullo por poseer una joya de esta índole; sin embargo, en el transcurso de 109 años las modificaciones mal llamadas remodelaciones realizadas por algunos presidentes municipales y varios gobernadores del estado han sido desafortunadas, desastrosas, deplorables. Unos y otros auxiliados por ingenieros o arquitectos imprudentes e irresponsables han dado cuenta de su total ignorancia en cuanto al arte que engalana el símbolo de Pachuca.
En 1961, el presidente municipal, Humberto Velasco Avilés, con el permiso del gobernador sustituto Oswaldo Cravioto Cisneros, despojó a la plaza Independencia de la pérgola construida en 1944 y sustituyó el mármol de los escalones del zócalo del Reloj por piedra volcánica, pero remedó los escalones como puede verse en esta fotografía de una postal.
1978: Destrucción irrazonable: el mármol, al escombro
Diecisiete años después de la “obra” del alcalde Velasco Avilés, el gobernador Jorge Rojo Lugo extendió carta blanca para que su hermano, arquitecto Javier Rojo Lugo “le metiera mano” a la Plaza Independencia. El arquitecto, carente de raciocinio sobre el valor artístico de nuestro emblema ordenó la destrucción del zócalo ( como queda registrado en la gráfica) que remplazó con una pileta que utilizaría como “espejo de agua”.
Como resultó contraproducente el bisoño proyectito, lo relleno con tierra para macetas y lo sembró con plantas silvestres y uno que otro arbolito que nunca dieron flores ni crecieron. Fue vivo reflejo de lo que escribió el historiador Víctor Manuel Ballesteros, quien sin emplear lacerantes adjetivos dejó para la posteridad: los «arquitectos» que proyectaron la mencionada remodelación, mostraron una crasa ignorancia, pues ordenaron que se demoliera el zócalo de nuestra torre señera, alterando así permanentemente las proporciones que, de manera matemática y precisa habían logrado concebir los arquitectos porfirianos. ¿Se enterarían alguna vez dichos «arquitectos» del alcance de su acción? ¿Sería que nunca entraron a las clases de historia de la arquitectura? ¿Cómo es que aprobaron tal asignatura?
1991: Nuevo zócalo con escalones, pérgola y plazuela
En 1991, el arquitecto Mario Viornery, alcalde de Pachuca, siendo gobernador Adolfo Lugo Verduzco, llevó a cabo la remodelación de la plaza Independencia y la construcción de nueva pérgola, destruida treinta años atrás. Renovó el zócalo del Reloj con mármol con sus escalones, pero….
2015: El capricho del señor gobernador Francisco Olvera Ruiz
Pasaron dos décadas más y en 2014, el gobernador Francisco Olvera firmó convenio con la secretaría de Turismo federal para remodelar a su entero gusto y capricho la Plaza Independencia. Una constructora afín a los intereses del gobernante ejecutó el proyecto que eliminó los escalones del zócalo, dejándolo cojo; quitó las jardineras y los árboles; las bancas y los arbotantes, además de los adornos de cantera instalados en la plazuela, construidos en 1991 por el alcalde Viornery. Nunca se dio a conocer el nombre del autor del proyecto. El alcalde en turno, Eleazar García, quien se decía “alcalde contratado” se prestó como cabeza de turco: todas las críticas las asimiló “estoicamente” hasta abril de 2016 en que “su” obra” fue inaugurada.
Terminó la huelga; Yolanda Tellería: vejigas para nadar
Tras 45 día de huelga, hoy regresarán a laborar los trabajadores sindicalizados de la presidencia municipal de Pachuca al obtener 6 por ciento de aumento al salario, pues el ayuntamiento otorgará 5 por ciento y el gobierno del estado el uno por ciento restante, sobre lo cual la alcaldesa exigió garantías para que en lo sucesivo el Ejecutivo estatal aporte dicho porcentaje, lo cual indica que la alcaldesa panista necesita vejigas para nadar. Por otra parte es obvio que a partir de hoy la maquinaria del Reloj Monumental funcionará nuevamente y marcará las horas. No obstante, por carecer de mantenimiento durante los 45 días de la huelga, esperamos que el mecanismo no haya sufrido desperfectos como lo advirtió hace una semana el Comité Técnico del Centro Histórico de Pachuca.