Dicen que, para reencontrarnos con la vida, solo se necesita una nueva perspectiva. Quizá, después de esta pandemia, podremos mirar a Pachuca como una ciudad nueva, disfrutar sus rincones como hace mucho no lo hacíamos, caminarla como por primera vez. Es cierto que nada será igual después del COVID; pero, eso no significa que todo será malo, solo será diferente; y lo diferente, es una oportunidad para una nueva experiencia. Sirvan estas fotos para recordarnos que, en realidad, nuestra capital seguirá siendo la misma hermosa, voluble, fría, cabulera, deliciosa y misteriosa de siempre. Lo que está cambiando es nuestra forma de verla.