“El tatuaje como extensión del arte, impregna nuestra existencia de su tiempo y contexto”.
PACHUCA — Chelle es una talentosa artista que se desempeña como pintora y tatuadora en Casa Cobra Tattoo, un estudio donde converge junto a otros colegas de tinta de estilos muy diversos.
Su acercamiento al tatuaje comenzó con su gusto por la cultura japonesa, donde los símbolos en los cuerpos de la Yakuza, la mafia japonesa, llamaron su atención.
Es artista visual egresada de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo y sabe que su talento en la pintura va de la mano con el arte que plasma en la piel. Por eso experimenta con técnicas y estilos para conjuntar la plástica con el tatuaje.
Lo que más les gusta tatuar son caricaturas a color; pero también es especialista en Blackwork, una técnica de tatuaje que utiliza nada más que tinta negra en sus diseños.
Contra la estigmatización del tatuaje
Conocimos a Chelle este 17 de julio cuando se celebra el Día Internacional del Tatuaje. Nuestra artista destaca la importancia de esta fecha porque, desde su punto de vista, aún hay mucha gente percibe esta actividad sólo como un pasatiempo y no consideran que tenga posibilidades de profesionalización.
Incluso aún hay personas que continúan estigmatizando al tatuaje, relacionándolo con actividades delictivas. De modo que, contar con un día internacional, ayuda a crear conciencia sobre esta actividad y celebrar a el gran colectivo de artistas que la conforman.
En el momento de captar esta historia, Chelle nos presenta a Calcifer, un pequeño demonio de fuego, personaje de una conocida película de animación japonesa de Studio Ghibli, quien funge como protagonista tanto en la piel de Luis, feliz lienzo de la artista, como de las imágenes que a continuación presentamos.