Cyrille Martin es un aclamado cineasta francés que en los últimos tiempos ha enfrentado el acoso del sistema político español por haber publicado un documental que siembra razonadas dudas acerca de la manera en cómo se trataron judicial, política y mediáticamente, los atentados a los trenes de Madrid, España, del 11 de marzo de 2004, conocidos como los “atentados del 11-M”.
La obra de Martín cuestiona si Jamal Zougam, ciudadano marroquí condenado a más de 40 años de prisión por el asesinato de 191 personas por su presunta participación en los atentados, es realmente culpable o se trata de un chivo expiatorio, parte de una estrategia de criminalización del Islam en Europa.
A catorce años del terrible caso, Martín presenta un paralelismo entre la condena a Jamal Zougam y la del capitán Alfred Dreyfus, condenado por traición en Francia a finales del siglo XIX, sin pruebas y como parte de una campaña anti-judía.
“Un nuevo Dreyfus: Jamal Zougam ¿chivo expiatorio del 11M?”, es el título del revelador documental de Cyrille Martín que, según testimonia, arroja luz sobre el entramado de la alta política para pasar por culpable a ciudadanos de países, casi todos musulmanes, que están bajo la mira de los grandes capitales.
A propósito, conversé con él para tener, de sus palabras, la visión del clima de Islamofobia y fascismo que hoy soporta Europa, el mundo, y las razones de esto. Sirva este texto para mover la solidaridad global con Cyrille, los millones de seres humanos que están siendo criminalizados por sus creencias o sus obras, para que las víctimas sepan la verdad y nunca más se repita algo así.
https://www.youtube.com/watch?v=CWYirZAV7aw
Alberto: Parece que Europa enfrenta un fortalecimiento de la derecha nacionalista ¿Qué opinas al respecto?
Cyrille: Este fenómeno no es ninguna sorpresa dado la crisis económica que empeora desde hace varias décadas. Es muy conocido que la gran crisis de los años 20-30 creó un clima muy favorable para las extremas derechas en toda Europa. Lo que es menos conocido, aunque los historiadores lo hayan probado de forma irrefutable, es que esas extremas derechas recibieron el apoyo del gran capital en su acenso al poder. Al gran capital le venía mejor que el enfado de la gente afectada por la crisis económica fuera canalizado hacia chivos expiatorios, judíos por ejemplo, que hacia los que controlaban la economía.
Hay que evitar a toda costa que la historia se repita, esta vez con la minoría musulmana. Uno de los elementos que motivan la hostilidad hacia ella es la idea que el islam los convertiría en terroristas en potencia. Yo hice este documental para contradecir este razonamiento, demostrando que en un caso importante, dado que el atentado de Madrid es el peor que haya sufrido Europa, un musulmán es injustamente condenado y encarcelado, y que a través de él, se acusa al islam falsamente.
Alberto: ¿Consideras que la Islamofobia es un clima generalizado en Europa?
Cyrille: No diría que es generalizado dado que no afecta a la mayoría de la población, aunque esta opinión este incrementando. Lo que más me preocupa acerca de la islamofobia, es que puede desencadenar consecuencias muy graves por el hecho de que se mezcla con otro fenómeno cuyo origen es completamente diferente, es decir el rechazo que existe hacia la población de origen extranjera motivado por otras razones que esta religión. Este asunto es complejo y no se puede decidir quiénes son los buenos y quienes son los malos, como lo hacen desgraciadamente la mayoría de los que abordan el tema. Es muy importante tomar en cuenta el punto de vista de todos a los que concierne esta situación. De esta manera podemos intentar desactivar las reacciones en cadena que nos amenazan, en esta época de incremento de los actos terroristas atribuidos (a veces falsamente como lo hemos visto) a musulmanes.
Nunca he vivido en uno de esos barrios donde se concentra la población de origen inmigrada, pero he ido durante 4 años a un instituto de uno de esos barrios llamados “conflictivos”. El rechazo que he podido constatar, por parte de franceses autóctonos, hacia los de origen inmigrados, se debía en general al hecho de que estaban hartos de una actitud que se podría llamar “bad boy”, mas común en esta población, y no tenia nada que ver con su religión musulmana. Esta actitud y esta mentalidad “bad boy” tienen sus propios códigos de vestimenta, de lenguaje y de comportamiento, que se caracterizan por la agresividad, y en las cuales la “rabia” y el “odio” casi se consideran como virtudes. Una de las razones principales por las cuales esta mentalidad se ha difundido en este entorno social (muy afectado por el paro y la pobreza), es que desde el punto de vista de los mas jóvenes, el modelo del delincuente es, a final de cuentas, preferible al del trabajador honesto, que vive con mas dificultades económicas. Obviamente no quiero decir que la mayoría elija la delincuencia. Los hombres de negocios que dirigen las televisiones y las radios han promovido cínicamente este modelo, popularizando el gangsta rap por ejemplo, un estilo muy arraigado en Francia.
Otro factor legitima este modelo, a través de un discurso muy corriente que presenta Francia, como irremediablemente deshonesto con la gente de origen extranjera. A groso modo, este discurso resume la historia del país a la única colonización que, sin querer minimizarla, es un capítulo entre otros en la historia humana, donde sobresale la explotación del hombre por el hombre según todas las modalidades. Sin embargo hace falta no olvidar que existieron en esta historia momentos mas alentadores y mas fieles al lema “Libertad, Igualdad, Fraternidad” (revolución francesa, revoluciones de 1848, Comuna de París, Frente Popular de 1936, Consejo Nacional de la Resistencia, Mayo del 68), y que otros momentos como estos todavía pueden repetirse.
Volviendo al asunto de la islamofobia, me parece que cada vez hay mas confusión en los debates, en el sentido de que, se atribuyen al islam problemáticas cuyos orígenes están en realidad en otras partes. Dicho esto, en algunos asuntos, como el estatuto de las mujeres, puede haber convergencia entre la actitud “bad boy” y un islam tradicional, que es él que se encuentra en las zonas rurales de África del norte, de donde vienen la mayoría de los inmigrados económicos (dado que los patrones franceses preferían reclutar en esas zonas mas que en las zonas urbanas, potencialmente mas politizadas). Hay que tener en cuenta también que un lenguaje conteniendo referencias a la religión puede ser el resultado de una voluntad de corresponder al estereotipo del mafioso tal y como se difunde en el cine, mas bien que a una adhesión real a dicha religión.
Alberto: En tu documental abordas temas como la manipulación mediática ¿Cual crees que es el papel de los medios de comunicación con relación a la población islámica y los refugiados?
Cyrille: En efecto se puede considerar en ambos casos que el tratamiento mediático es manipulador, pero según modalidades muy distintas:
Sobre los musulmanes, en mi documental se puede ver que casi ningún medio de comunicación ha hecho el trabajo básico de comprobación de los hechos, aunque las audiencias del juicio demuestran claramente que Jamal Zougam es inocente, a pesar de la sentencia del juez. Es mentira por omisión, en el sentido que la mayoría de los españoles cree que Zougam es culpable por el mero hecho de que todavía no han visto las imágenes de los momentos claves del juicio, silenciados por los medios de comunicación. Han fallado en su papel de cuarto poder, el de controlar los tres otros. De esta manera participan en avalar el cliché, que se instala poco a poco en las mentes, según el cual el islam lleva periódicamente al terrorismo. En un orden de ideas similar, me llama mucho la atención que haya tan poco cuestionamiento sobre el papel que puede haber tenido el captagon, mas conocida como droga de los soldados de daesh, en los atentados de esos últimos años. Esta pregunta es de gran importancia porque se trata de saber si su fanatismo se debe a un adoctrinamiento estrictamente religioso, o mas bien a esta droga, que les hace perder el contacto con la realidad y los vuelve manipulables y sanguinarios, como los testigos del Bataclan lo sugieren. Por cierto, es lamentable que los terroristas sean sistemáticamente matados, a veces varios días después de los hechos, porque impide que la Justicia los interrogue para aclarar este tipo de preguntas.
Sobre los refugiados, los medios de comunicación han hecho una cobertura muy pormenorizada de la recién “crisis migratoria”. Cabe preguntarse cuales son las razones de tal cobertura mediática. ¿Se debe a un impulso espontaneo de solidaridad por parte de los equipos de periodistas? ¿O las empresas transnacionales que poseen los medios de comunicación tienen algún tipo de interés en llamar la atención sobre este tema? Esta claro que manifestar solidaridad con la gente que corre peligro esta bien, pero cabe superar las emociones y analizar fríamente el impacto que tiene esta campaña mediática sobre el espectador X, cuyas condiciones de vida son cada vez mas precarias en estos tiempos de crisis económica. Es probable que vea al refugiado como alguien que atraviesa una experiencia difícil, y a la vez como un competente potencial en el mercado de trabajo, en el cual hay cada vez menos empleos, y donde el refugiado aceptará, sin lugar a dudas, condiciones de trabajo mas duras que las suyas. Este es el punto de vista que explicaba recientemente el famoso director británico Ken Loach, acerca de la forma de percibir a los inmigrados baltos en las zonas agrícolas de su país. Tal vez las organizaciones, cuyo apoyo a los refugiados se refleja en los medios de comunicación, deberían preguntarse por qué se interesan en ellas. ¿Por altruismo desinteresado? ¿O se trata de una maniobra cuya meta real es convencer al espectador X de que esas organizaciones actúan en contra de su interés personal, y disuadirlo de votar para los partidos que muestran solidaridad con los emigrantes?
Alberto: ¿Qué se puede hacer para combatir los males de la islamofobia y la manipulación mediática?
Cyrille: Para atacar esos problemas desde la raíz, hay que mejorar la integración de la población de origen inmigrante. Y esta integración, que implica el sentimiento de encontrar un sitio en la sociedad, siempre se ha logrado a través del mundo laboral. Esa es la razón principal por la cual en Francia las distintas olas de emigración lograron integrarse hasta el momento en que apareció el paro masivo, en los años 70. La buena noticia es que la escasez de empleos no es irremediable, porque hay que ser conscientes de que uno de los objetivos de nuestros gobiernos es, en realidad, de mantener una tasa de paro suficientemente alta, lo cual evidentemente no pueden confesar si quieren ganar elecciones una y otra vez. Esto es sencillamente la ley de la oferta y la demanda : en el mercado laboral, la oligarquía necesita que los empleos sean escasos para que los candidatos acepten cada vez mas sacrificios en sus condiciones de trabajo. Esto también es conocido como chantaje del empleo, que impide a los empleados negociar aumentos salariales.
De esta manera el capital ha podido multiplicar sus ganancias a costa de los salarios, transfiriendo en unas décadas una docena de puntos del PNB de los salarios hacia el capital en Francia. La escuela neo liberal expresa con medias palabras esta estrategia mediante el acrónimo inglés N.A.I.R.U, o sea “Tasa de Paro que No Acelera la Inflación”. Si se prefiere el lenguaje marxista, se hablará del “ejército de reserva industrial”. Así que el paro masivo no es ninguna fatalidad sino una opción social no explicitada, y varias estrategias han sido propuestas para superarlo. Personalmente, me convence menos la opción de la renta universal que la del reparto del tiempo laboral (por ejemplo mediante la semana laboral de 4 días sin baja de salario, dado que ya no harían falta cotizaciones para el paro, ni habría chantaje del empleo y entonces se podrían negociar aumentos salariales), dejando de lado la opción ilusoria y contaminante del gran crecimiento económico.
Cabe notar que si los sindicatos patronales franceses hacen declaraciones tan favorables a la inmigración, es porque tienen interés pecuniario en mantener una fuerte competencia en el mercado laboral, y no porque tienen fe en las success stories y los cuentos de hadas de unos informáticos inmigrados en la Sillicon Valley. En resumen, la superación del paro masivo permitiría cumplir dos metas : una, mejorar las condiciones de vida de las clases populares en general y las inmigradas en particular, y, dos, mejorar su integración, reduciendo las tensiones que mencionaba anteriormente.
Alberto: Al respecto, ¿qué se puede hacer desde el arte?
Cyrille: El arte puede servir a que se tome consciencia del punto de vista de otras personas, del contexto en el cual vive y piensa. Pero cuidado, porque como en el caso de los medios de comunicación, puede también servir para manipular.
Alberto: Para finalizar, ¿qué papel tiene el sionismo israelí sobre el clima de islamofobia que se vive en el mundo?
Cyrille: No creo que el sionismo israelí sea al origen de este clima, pero es evidente que el gobierno israelí actual tiene interés en que se difunda la islamofobia, porque puede atraer simpatía hacia el poderoso pero pequeño estado israelí, rodeado por sus grandes vecinos musulmanes. El conflicto palestino- israelí es un factor que empeora las tensiones con los musulmanes. Pero, aunque el estado israelí no hubiese sido fundado, creo que estas tensiones existirían por la sencilla razón de que una de las estrategias más viejas y eficaces para conservar el poder es la de “divide y vencerás”, que implica que una población sea dividida según un criterio u otro.