Apenas la mayoría de Morena en el Congreso local dominada por el Grupo Universidad acusaba la injerencia del Ejecutivo estatal en las tareas legislativas, cuando este mismo grupo hizo publica una reunión entre sus dos jefes en la Legislatura, Ricardo Baptista y Humberto Veras, con el subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta, en la Ciudad de México. No se conocen los detalles de tamaño encuentro, pero voces dentro del Movimiento de Regeneración Nacional en Hidalgo afirman que la fracción sosista en la Cámara ha acudido con Peralta para pedir ayuda en dos sentidos: tener una opinión favorable de estos ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, y contar con el apoyo de la Segob en la consabida intentona morenista de imponerse en la presidencia del poder legislativo por los dos años restantes, reventando los acuerdos de repartir cada año la coordinación entre estos, el PRI y el PAN. Faltará atestiguar si resulta el cabildeo de Baptista y Veras con el subsecretario Peralta, autodenominado «apostol de la 4T», talante que podría beneficiar a sus propósitos por semántica militante, pero qué podría tener un efecto bumerang en tanto que el presidente López Obrador tiene férreo interés en erradicar el tráfico de intereses políticos.