El Grupo Universidad –conjunto de funcionarios de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo que fueron impulsados al Congreso local con las siglas de Morena–, buscaba reformar la Ley orgánica de la Cámara de Diputados del Estado para apoderarse, durante tres años, de la presidencia de la Junta de Gobierno de la Legislatura. La iniciativa rompía con el pacto de las tres principales fuerzas políticas locales (Morena, PRI y PAN) en el cual a cada una de ellas se le otorgaría un año la titularidad del poder legislativo. El acuerdo finiquitó la crisis derivada por la disputa de dicho cargo por estos tres partidos políticos y dio gobernabilidad a Hidalgo.
Pero al cabo de un año, el Grupo Universidad quiso reformar la Ley Orgánica –modificada en la anterior Legislatura–, para que los tres años se quedaran en su poder, rompiendo los acuerdos iniciales y provocando una nueva crisis que forzó la intervención de la Secretaría de Gobernación federal.
Sin embargo, cuatro de los diecisiete diputados y diputadas de Morena, ya no quisieron seguirle el juego al Grupo Universidad, aislando a la facción.
La diputada de Morena por el distrito de Tizayuca, Susana Ángeles Quezada, publicó por la tarde de este martes 24, un comunicado en el que denuncia intimidaciones del Grupo Universidad en su contra y de cuatro de sus compañeros de bancada, al querer obligarles a continuar la disputa por la presidencia del Congreso a través de la reforma a la Ley Orgánica del poder Legislativo.
En el documento, firmado también por las diputadas Tatiana Ángeles Moreno, Rosalba Calva García y el diputado Víctor Osmind Guerrero Trejo, Ángeles Quezada anunció que se rehúsa a continuar con la «espiral de un conflicto estéril», refiriéndose a la pugna del Grupo Universidad en Morena por la presidencia del Congreso, con base en la consigna del presidente Andrés Manuel López Obrador de no hacer política buscando cargos, sino por el bien del pueblo.
Enseguida, la diputada del Grupo Universidad, Roxana Montealegre Salvador, acusó a Ángeles Quezada de reventar la iniciativa por no ser propuesta como la nueva presidenta del Congreso.
Pero la legisladora por Tizayuca reviró el mensaje de Montealegre Salvador, acusándola de manipular la información.
Este zipizape tuitero confirmó lo expuesto en el comunicado de Ángeles Quezada en el que se materializa la cantada ruptura del Grupo Universidad con el Movimiento de Regeneración Nacional en Hidalgo, y que ya había iniciado cuando el actual coordinador del Congreso, Ricardo Baptista, se negó a compartir la administración y a junta política del Legislativo con sus compañeros de Morena, porque no forman parte de la facción universitaria.
Al cabo, el Grupo Universidad se queda sólo con once representantes en el Congreso local y ha perdido la mayoría que gozó al inicio de la Legislatura. Los disidentes, se adscriben como verdaderos militantes de Morena y no como parte de un bando de intereses «oscuros» y «mezquinos».
