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jueves, abril 25, 2024

Que suene La Hora Jazz

Para principios del 2006, La Hora Jazz daba el salto de calidad e irrumpía sobre los megahertz de la radio pública hidalguense. Sus camaradas centraban el dial en el 98.1, las 20 horas, es tiempo de beat… “Hola ¿cómo están? Muy buenas noches, bienvenidos a La Hora Jazz….”.  A cinco años de transmisión,  su sonido nos sigue inundando.

por A. Rodríguez

Año 2005 y por las bocinas de la radio experimental del Instituto de Ciencias Sociales de la UAEH, un eco de bajos y piano sincopado le ponía ritmo a la mañana estudiantil. En la cabina universitaria, Jesús Ángeles, un menudo y talentoso estudiante de Comunicación, daba la bienvenida al primer gran proyecto de “Bulbo Radio”: “Hola, muy buenos días, estás escuchando La Hora Jazz….”.

Su voz cálida, profunda y afable se entrenaba para dar el siguiente paso.

Para principios del 2006, La Hora Jazz daba el salto de calidad e irrumpía sobre los megahertz de la radio pública hidalguense. Sus camaradas centraban el dial en el 98.1, las 20 horas, es tiempo del beat… “Hola ¿cómo están? Muy buenas noches, bienvenidos a La Hora Jazz….”, cundía la locución de aquel aún estudiante, que pronto se convertiría en el mayor difusor del género en todo el Estado.

Al paso del tiempo, acudieron a su encuentro, transmitiendo desde la cabina o bajo la charla amena de Ángeles, jazzistas y músicos de la talla de Verónica Ituarte, Elizabeth Meza, Neftalí López y César Huesca. La Hora Jazz cumplía con creces su objetivo: El Jazz no sólo es libertad de expresión, sino un espacio entre amigos. Ahora Hidalgo lo sabía.

Jesús Ángeles de a poco se fue convirtiendo en uno de los locutores más escuchados en las noches hertzianas de Pachuca.

Luego, La Hora Jazz amplió sus horizontes. Ángeles comenzó a escribir la columna homónima en el diario Síntesis y, por primera vez, un periódico de amplia circulación daba voz, es decir, palabra, al amado jazz del locutor y sus fanáticos.

En aquel breve espacio de letras y susurros anecdóticos que se acompañaban del suave sonido del sax de Dave Brubeck –uno de los preferidos por Jesús-, cada semana se podía leer lo mejor y más reciente del mundo jazzístico local, nacional e internacional.

Hoy, La Hora Jazz cumple cinco años –o siete, según se quiera-, y sigue siendo las “síncopas musicales” más exitosas del 98.1

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