PACHUCA — Luego de quedarse sin candidatura, las cosas le pintan mejor a Israel Félix Soto. O, al menos, así lo sugieren las profusas palabras que le dedicó el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, en el encuentro del pasado fin de semana entre alcaldes priístas y la precandidata de Va por Hidalgo, Carolina Viggiano Austria.
‘Alito’ no cabía en la euforia. Al fin había conseguido que el alcalde de Mineral de la Reforma se tomara la foto con Carolina Viggiano Austria y así podría presumir la unidad del Partido en la precampaña por la gubernatura. De tal emoción que, antes del flashazo, el presidente del PRI se acercó a Félix Soto, lo abrazó y, en su lenguaje campechano, selló su alegría y, al parecer, la factura del encuentro: «¡Chingo a mi madre si no cumplo lo acordado!», le dijo de cerca.
Ambos políticos reaccionaron al abrazo. Moreno Cárdenas por el éxito cosechado y Félix Soto por las promesas conseguidas. ¿Y qué clase de acuerdos habrán fraguado que valió la anuencia de importunar a la progenitora del presidente nacional del PRI? ¿Una senaduría? ¿Una diputación? ¿Mas que eso? Ellos (y la madre de Moreno Cárdenas) sabrán. Pero es un hecho que el edil de Mineral de la Reforma estuvo tan contento que hasta se quedó a la tradicional taquiza que organiza el tricolor cada que acaba un evento de esa calada.
Atrás parecen quedar los tiempos del encono. Viggiano Austria y Félix Soto andarán la campaña, de cierta forma. Sólo se espera que ‘Alito’ cumpla su palabra, pues, ya empeñó una mentada. A menos que tenga asimilado haber chingado a su madre en tantas ocasiones anteriores que, una más, le resulte más bien barata y no le sea problema inumplir «lo acordado», si las circunstancias no lo favorecen. Lo veremos pasado el cinco de junio.
