El panista Asael Hernández Cerón y Carolina Viggiano, ex aspirante de Va por México a la gubernatura de Hidalgo, se encargaron de perpetuar y minimizar la lucha de miles de mujeres hidalguenses. Prueba de ello fue la conservación en el discurso político de la imagen de las mujeres como eternas amas de casa que requieren de apoyos paternalistas por parte del Estado Mexicano.
Durante una reunión con militantes y simpatizantes en la comunidad de Coacuilco, el dirigente blanquiazul sostuvo: “las mujeres tienen que ver que alcance con lo que los maridos les dejamos en la casa”, haciendo evidente la violencia económica a la que miles de mujeres se tienen que enfrentar en la entidad a causa de un sistema patriarcal que limita el desarrollo financiero de las hidalguenses.
Asael Hernández, quien fue uno de los principales detractores de la despenalización de aborto en Hidalgo y de otras leyes de reconocimiento de los derechos de las hidalguenses, ha sostenido que son estas quienes deben estar cobijadas por “dádivas” para poder hacer rendir el dinero que sus maridos les proporcionan, dejando entrever el férreo machismo que persiste entre la vieja clase política.
Asimismo, el ex legislador señalado por supuestas agresiones en contra de sus propias compañeras de partido, también sostuvo que las mujeres son incapaces de generar sus propios recursos por lo que es necesario generar estrategias como la tarjeta que fue conocida como “La Contenta” para que a la par, las mujeres agradezcan a un sistema que durante años las ha mantenido al margen de la participación en el ámbito económico, político y social de Hidalgo.
Por su parte, Carolina Viggiano mantuvo en su discurso posturas erróneas respecto a la lucha feminista, pues no sólo se adjudicó la autoría del término “violencia feminicida”, sino que en sus redes sociales demostró que su postura al respecto de la imagen de las mujeres corresponde a amas de casa que esperan la llegada de sus maridos, hecho que invisibiliza a las mujeres campesinas, obreras, estudiantes, maestras, profesionistas y empresarias que a diario se enfrentan a un sistema machista.
