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jueves, marzo 28, 2024

Tendencia electoral favorece a AMLO en Hidalgo

Un estudio especial del Dr. Pablo Vargas González reproducido por Desde Abajo con anuencia del autor, sobre los escenarios electorales en el Estado de Hidalgo en las elecciones del próximo 1 de julio a renovar Congreso y donde también se elegirá Presidente de la República.  En él se advierte un voto favorable a Andrés Manuel López Obrador sobre el efecto de «arrastre nacional»

ESCENARIOS ELECTORALES DEL 1° DE JULIO EN HIDALGO. LOS LABERINTOS DE LA TRANSICIÓN POLÍTICA.

por Pablo Vargas González  

Investigador de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM)

En el largo proceso de transición política en el estado de Hidalgo, las elecciones presidenciales de 1988 marcan un “parteaguas” en la vida política y electoral. Iniciada la “reforma política” de 1977 fue hasta aquel año, en una elección presidencial cuando empiezan a notarse cambios en las preferencias electorales, en el pluralismo y en la cultura política de esta entidad. Por primera vez el PRI, en la etapa contemporánea se enfrentó a una fuerte oposición que le compitió en la geografía y en los distritos electorales.

De 1988 al 2006 el cambio de preferencias y el voto diferenciado, sobre todo en el tipo de elecciones federales ha sido una constante lenta pero inequívoca de la competitividad electoral. La elección presidencial del 2006 sin embargo ha sido la más significativa porque invirtió por primera vez la orientación del voto de los hidalguenses de modo absoluto. Ni siquiera con la alternancia en el 2000  el voto fue tan esclarecedor (Cuadro 1).

En el 2006 las urnas mostraron la orientación del voto y la mayoría de hidalguenses cambiaron las tendencias: la coalición de izquierda “Por el Bien de Todos” en cabezada por André Manuel López Obrador obtuvo el primer lugar con 385 750 sufragios (40.79{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}), Felipe Calderón del PAN alcanzó 251 772 votos (26.6{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}), y Roberto Madrazo tuvo 235 926 votos (24.9{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}), en ese orden.

Hoy seis años después se enfrentan las mismas fuerzas políticas pero en condiciones electorales distintas. Hoy como hace seis años, las variables claves dependen de la participación ciudadana, el comportamiento de los gobiernos y partidos y en la legalidad electoral.

Contexto y condiciones de coyuntura.

Existen varios elementos que conforman el contexto político nacional y local.

1) Las condiciones electorales. Después de las elecciones de 2006, donde hubo amplia impugnación por los resultados, y las críticas a la injerencia de poderes fácticos y “campañas negras”, el gobierno federal y los partidos se pusieron de acuerdo en una nueva “reforma electoral” y buscaron dar mayor claridad, certidumbre y legalidad a los procesos electorales. Tales reglas se pusieron a prueba en 2009 pero será el próximo domingo cuando se estrenen en una elección presidencial.

La Reforma electoral 2007-2008 incidió en: Reducir el periodo de campañas, regular la compra de propaganda a través del IFE, la fiscalización de gastos de partidos, la restricción al uso de recursos públicos,  y la restricción a la propaganda gubernamental. Se abrió nuevas facultades contra la impunidad de quejas y apertura para la resolución de juicios. También lo nuevo fue incluir la figura del “recuento de votos” en el computo electoral, en caso de impugnaciones e irregularidades evidentes.

Si bien se han acotado campañas “negras y negativas”, aun siguen presentes prácticas del uso de recursos públicos de programas sociales en todos los niveles, y la intervención de gobiernos federal, estatal y municipal, así como también en la compra y coacción de votos, acciones que pueden romper la equidad y legalidad.

2) Contexto nacional. La elección servirá también para evaluar doce años de alternancia del gobierno del PAN, sin embargo lo más reciente y  que tiene presente el electorado es la referencia al actual sexenio. Siendo lo más característico la política de “guerra contra la delincuencia”, no de un modo anecdótico, sino porque puede repercutir en los votantes para inhibirlo de asistir a las urnas.

Se tiene una crisis de seguridad pública que ha arrojado más 60 mil muertes, miles de desapariciones forzadas, cientos de miles de “desplazados”, personas que huyen de sus lugares de residencia para evitar la violencia.  Aunado a ello coinciden elementos de crisis social: desempleo, olvido al campo, falta oportunidades a jóvenes Ninis (8-16 millones).

En conjunto, el país viene arrastrando una crisis política desde hace décadas, centrada en un desencanto con partidos e instituciones, que conlleva hacía la desconfianza y baja credibilidad de algunos sectores sociales.

3) Contexto Local. En cuanto a las condiciones sociales de la entidad, persisten los elementos señalados en el Censo de población de 2010. La población en Hidalgo es de 2 665 018 habitantes se encuentra distribuida en más de 4, 500 localidades. El 2{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de éstas son mayores de 2,500 habitantes concentrando el 47.5{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de la población estatal. En contraste, existe una gran dispersión poblacional en 3,722 localidades menores de 500 habitantes y su población equivale al 22.3{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de la población total.

Para el Consejo Nacional de Evaluación dela Políticade Desarrollo Social, el Estado de Hidalgo padece la pobreza en sus diferentes expresiones: alimentaria, de capacidad y patrimonial, según lo indican los estudios en desarrollo social. La pobreza entre los hidalguenses constituye un mal endémico. De acuerdo con datos del Coneval, más de seiscientos mil hidalguenses padecen hambre, trescientos mil adultos no saben leer ni escribir y más de cien mil niños en edad escolar no asisten a la escuela.

Solo cinco municipios concentran el 60{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de las remuneraciones de la Población Económicamente Activa (PEA), según Inegi 2009, el contraste es abismal frente a al resto de municipios que carecen de fuentes de trabajo y al escaso desarrollo regional, de ahí la pobreza, expulsión de migrantes, desempleo juvenil y las carencias de vivienda, educación y salud.

 

Partidos y candidaturas.

La selección de candidaturas tanto en el nivel nacional como local es un factor que va repercutir en esta entidad. La atención se concentra, como en el 2006, en la figura de candidato presidencial. Especialmente cierto para las tres fuerzas presidenciales. Se observan ligeras modificaciones en la construcción de alianzas y coaliciones. En las últimas elecciones locales (gobernador) donde el PRI-PVEM y PANAL han unificado propuestas, no se repite. Mientras Enrique Peña Nieto encabeza la coalición PRI-PVEM “Comprometidos por México”, en Hidalgo no se concreta. Andrés Manuel López Obrador lidera “El Movimiento Progresista” con PRD, MC y PT, Josefina Vázquez Mota va sola con el PAN, al igual que Gabriel Cuadri con el PANAL.

El PRI a diferencia del 2006, trabajó desde hace años en la unidad interna del PRI, si bien tuvo diferencias con el Senador Manlio Fabio Beltrones, Peña Nieto pudo lograr la candidatura merced a los sectores tradicionales y a las encuestas. Esto permitió que su grupo pudiera sacar las candidaturas en los estados, no sin algunos cuestionamientos. Para el Senado, si bien había varios “apuntados” se enfrentaron a Omar Fayad (presidente del PRI) y David Penchyna (Secretario de Sedeso y diputado federal) quienes tenían una amplia ventaja. No hubo abiertas inconformidades.

En las diputaciones, el equipo de Peña Nieto, encabezado por Miguel Osorio Chong pudo inicialmente poner condiciones, no solo en mayoría relativa sino también en representación proporcional. Sin embargo al momento del registro, por problemas de “equidad de género” bajaron a Roberto Pedraza y a Enrique Gerardo Macedo, pese a haber realizado convenciones y haber sido electos, lo que causó no solo incomodidad sino con eventuales consecuencias en la votación de esos distritos. La sorpresa inesperada para el grupo gobernante fue la llegada de José Antonio Rojo García de Alba, quién llegó desde el CEN a pesar de las piedras en el camino.

En el PAN se dio una selección que ya venía “cantada”, solo hubo diferencias por quién ocupaba la primera y segunda fórmula. Xochitl Gálvez, ex funcionaria del gobierno de Fox, como ex comisionada nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y ex candidata a gobernadora en 2010 se impuso a Daniel Ludlow Kuri, quién en 2006 ganó la diputación federal de esta capital. En difíciles designaciones en los distritos, se nombraron a personas de “bajo perfil” salvo en el distrito 06 de esta capital, quién lleva a Luis Enrique Baños Gómez, conocido en el área metropolitana por su candidatura en Mineral de la Reforma.

En la coalición de izquierda Movimiento Progresista, AMLO había pedido inicialmente a tres candidatos: Abraham López Centeno, en Tula de Allende, Gabino Brandi y Edith Ibarra, está última fue sacada de la jugada al ser detenida por delitos comunes. De los tres solo quedó el ex alcalde de Huazalingo. No valieron encuestas ni negociaciones, nuevamente se impusieron los grupos. En el Senado la sorpresa fue el líder de la UFIC Isidro Pedraza y Julieta Guevara, una ex priista de los años sesenta, que fue revivida sin ninguna explicación ya que no representa ningún valor de izquierda.

En el caso del partido Nueva Alianza (PANAL) poco se supo de sus designaciones, la mayoría profesores, que fueron designados a última hora, sacando a figuras de la Sección XV del SNTE que ya estaban puestos pero la fallida alianza con el PRI los obligó a retractarse.

Campaña: el efecto de “arrastre nacional”.

La centralización de las campañas electorales a nivel de las candidaturas presidenciales para no dispersar las consignas y los mensajes centrales, nuevamente se repitió al considerar como estrategia el enfocarse en los nombres de Peña Nieto, Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador. A tal grado de no ser por los medios locales (radio, TV y prensa) las candidaturas al Senado hubieran pasado desapercibidas, en las que se dio más información a las del PRI.

Como toda elección nacional, existe una preponderancia a seguir a los candidatos presidenciales, cuya exposición en los medios nacionales logra atravesar el país y las estructuras locales dependen de las campañas centralizadas. No obstante también influyen los actores y arraigo locales. En este contexto, lo que hubiera sido la diferencia, los candidatos de los partidos en Hidalgo se colgaron de las estrategias centrales del marketing, y desaprovecharon la oportunidad de innovar. De tal suerte que los principales partidos nuevamente se centraron en spots y publicidad en radio y T. V., para hacer una campaña esencialmente mediática.

Llamó la atención que Enrique Peña Nieto, al igual que Luis Donaldo Colosio en 1994 hubiera empezado en Huejutla su campaña electoral. También ahí se registró un traspié al equivocarse en la despedida en lengua náhuatl.

Josefina Vázquez Mota visitó en varias ocasiones la entidad como pre candidata en enero y luego como candidata en febrero y marzo, aunque en junio declinó hacer su cierre en la entidad, igualmente como hace seis años Felipe Calderón. López Obrador (AMLO) hizo varias visitas, a Hidalgo sus visitas a Huejutla, Tulancingo y Actopan y el cierre de campaña en Pachuca mostraron la capacidad de convocatoria y el ascenso de las movilizaciones en su favor.

Las acusaciones de “usar los programas sociales” entre el PRI y PAN fue la tónica de campaña. Los líderes locales hicieron varias promesas de que Hidalgo sería contribuidor de decenas miles de votos a sus candidatos. La intensidad de las acciones llevó a confrontaciones directas en algunos lugares. Disparos contra una agencia de comunicación y agresión a periodistas fueron un saldo. Los debates presidenciales calentaron las acciones propagandísticas y la aparición de las redes sociales, la movilización de jóvenes “#Yo soy 132” y los observadores de la sociedad civil revitalizaron la campaña.

Escenarios y tendencias.

En una lenta transición política, con doce años de alternancia federal, en Hidalgo persisten evidentes rezagos socioeconómicos y escaso desarrollo de las instituciones políticas. Las reformas políticas han sido insuficientes para desmontar estructuras políticas tradicionales y prácticas y rasgos autoritarios. Además de los cargos de representación, el 1° de julio nuevamente se pone a deliberación las posibilidades de transitar hacía condiciones de mayor institucionalidad y apertura de canales y vías de participación.

En Hidalgo la combinación de factores socioeconómicos y de la coyuntura actual eleva la incertidumbre sobre los resultados electorales, nadie puede levantar la mano sin pasar la prueba de las urnas. La historia política hidalguense incluye elementos nuevos y tradicionales. Por una parte, grandes sectores empobrecidos, y una cultura política subordinada y providencialista puede ser frágil presa de la compra, inducción y coacción del voto, pero también sectores sociales participativos, emergentes y críticos se amalgaman en el electorado que votará el domingo.

Si bien el PRI ha venido reposicionándose en elecciones federales y locales, también es cierto que enfrenta un voto competitivo y cerrado en los últimos comicios (2010 y 2011). Los fenómenos electorales de los últimos años, como son la volatilidad electoral, en que el votante sufraga por distintos opciones, generando un voto diferenciado, la presencia de comunicación a través de redes sociales, la presencia de organismos de la sociedad civil, y la intervención de jóvenes y estudiantes serán nuevos componentes que pueden incidir en la orientación del voto.

Hay tres elementos claves en la configuración de escenarios políticos: 1) la participación ciudadana es fundamental, los electores tienden a participar más en elecciones presidenciales que en las de legisladores y comicios locales, 2) la incidencia de irregularidades y trampas ha venido disminuyendo pero la cantidad de problemas puede generar esquemas de conflictividad y 3) la competitividad electoral, es decir las diferencias entre el primer y segundo lugar.

Escenario de baja participación y aceptación de resultados. La primera fuerza obtiene una clara ventaja (mayor de 5{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}), en los tres tipos de elecciones (presidencial, Senado, diputaciones) frente a sus adversarios. Hay baja participación (40-50{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd} de abstencionismo). Los incidentes electorales son menores. Los partidos interponen juicios pero aceptan los resultados electorales.

Escenario de intensidad media. La asistencia a las urnas es cercana al 60{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}, hay evidencias de un voto diferenciado en los distritos. Se producen notables incidencias e irregularidades. La diferencia de votos entre el primer y segundo lugar es menor de5{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}. Se hace un significativo recuento de votos en tres de siete distritos. Aumenta el número de quejas y juicios. Hay incertidumbre y movilización social. Se reconocen los resultados de manera diferenciada.

Escenario de intensidad alta. La asistencia a las urnas es mayor al 60{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}, con grandes expectativas, el voto diferenciado es sumamente alto en los distritos y en la entidad. Se producen notables incidencias e irregularidades. La diferencia de votos entre el primer y segundo lugar es menor de 5{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}. Se hace el recuento de votos en los siete distritos. Aumenta el número de quejas y juicios. Hay abierta inconformidad y movilización social. La impugnación de partidos afecta el reconocimiento de los resultados.

Estos escenarios dependen de los partidos, candidatos y autoridades de los diferentes niveles de gobierno, como también de la calidad del desempeño de las autoridades electorales. El apego y respeto a las normas y leyes determinará el rumbo de la credibilidad y legitimidad de esta elección.

 

 

Cuadro 1. Resultados de las elecciones presidenciales 2000-2006 en Hidalgo ({9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd})

  PAN PRI/PVEM PRD Otros

2000

34.6

43.50

16.74

2.63

2006

26.63{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}

24.95{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}

40.79{9e1ff1bee482479b0e6a5b7d2dbfa2de64375fcf440968ef30dd3faadb220ffd}

4.34

   En 2000 el PAN se alió con el PVEM; en 2006 el PRD, PT y PC formaron alianza

 

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