Luego de que Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) relegara al Grupo Universidad en las candidaturas federales, esta organización busca a través del Partido del Trabajo (PT) tener posiciones políticas a nivel local en los siguientes tres años, pero en su paso por cada partido genera incertidumbre y desestabiliza.
El Grupo Universidad (GU) busca posicionarse políticamente a través del Partido del Trabajo (PT) con la promesa con los dirigentes del instituto de la estrella de obtener el tres por ciento a nivel local y un escaño en el Senado mediante la candidatura de Damián Sosa Castelán, quien dijo anda con amparo en mano por “cualquier situación”.
El hermano de Gerardo Sosa Castelán, fundador de este clan político, es acusado de los delitos de delincuencia organizada y uso de recursos de procedencia ilícita por 58.2 millones de pesos y otros miembros de este clan son mencionados en la causa penal, por lo que el aspirante a la cámara alta ha solicitado la protección de la justicia federal.
“Sí, estoy amparado, no me da pena comentarlo. ¿Por qué? Para lo que resulte. Porque afortunadamente hemos sido tema de una cuestión política. Es un tema político que afortunadamente se ha estado desahogando con los tiempos judiciales”, comentó Damián Sosa.
La agrupación compite por el PT luego que Morena los relegará en las candidaturas para el proceso electoral 2023-2024. “No pasa nada, estamos en el Partido del Trabajo, que es igual a la 4T”.
Sin embargo, recordó que en 2022 y 2018 obtuvieron varias posiciones con Morena, en el proceso 2021-2022 fue en candidatura común con el Partido del Trabajo (PT), en la que GU obtuvo cuatro curules: José Antonio Hernández Vera, Elvia Yanet Sierra Vite, Jorge Hernández Araus y Jesús Osiris Leines Medécigo, estos últimos presidentes de la Junta de Gobierno del Congreso local.
Chapulines expertos
No obstante, su mayor presencia fue en la LXIV Legislatura del Congreso local con nueve diputados: Doraalicia Martínez Bautista, Humberto Veras Godoy, Rafael Garnica Alonso, José Antonio Vera Hernández, María Corina Ramírez Baptista, Ricardo Baptista González, Jorge Mayorga Olvera, Noemí Zitle Rivas y Roxana Montealegre Salvador, esta última ya no es parte de GU.
Su llegada a Morena fue durante la dirigencia de Abraham Zenteno Mendoza, quien abrió la puerta a esta agrupación, que tras las dirigencias de Sandra Ordoñez y Marco Antonio Rico Moreno tiene presencia en la dirigencia estatal con Marivel Solís Barrera, exdiputada federal y actualmente Secretaría General de Morena; Marisol Ortega López, edil de Tepeapulco y presidenta del Consejo de Morena en Hidalgo.
Si bien la llegada de GU al partido de la estrella podría significar capital político a este instituto, no siempre ha sido así, la agrupación ha pasado por cuatro partidos, intento formar uno sin éxito, Sociedad Hidalguense y se les señala que son los responsables de que el Partido Social Demócrata (PSD) no prosperará en Hidalgo.
Roxana Montealegre Salvador, exregidora por Acción Nacional (PAN) y exdiputada por Morena y Alejandro Olvera contribuyeron a la extinción del PSD. Hoy ambos se fueron de esta agrupación y ocupan puestos federales en el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador.
Asimismo, en 2017, Damián Sosa Castelán llegó como dirigente de Movimiento Ciudadano (MC). Previó a las elecciones 2018 renunció con el argumento de un presunto incumplimiento de la comisión operativa de la dirigencia nacional, pero nunca precisó que conflicto tuvo con Dante Delgado. Al momento de dejar el naranja, el integrante de GU no concretó una alianza con el PAN y PRD, ni el nombramiento de candidatos.
Sin embargo, el comisionado político nacional, Javier Vázquez Calixto aseguró en una entrevista con medios que cuentan con perfiles competitivos, como en el aspirante a la senaduría por Hidalgo, Damián Sosa Castelán, su sobrino Salvador Sosa Arroyo en la alcaldía de Tulancingo y Osiris Leines Médecigo en el Ayuntamiento de Mineral de la Reforma, todos del clan de los Sosa Castelán.
El comisionado ya había adelantado que competirían solos en la búsqueda de diputaciones locales y ayuntamientos, lo que se concretó el 28 de febrero y primero de marzo, pues Morena no cumplió con los acuerdos de otorgarle una candidatura a una diputación federal.
Vázquez Calixto aseveró que la ruptura de la colación entre el PT y Morena no les fue notificada 5 días antes del inicio de campañas federales, por lo que tuvieron que designar candidatos a diputados federales, pero en diciembre ya había dicho en entrevista que irían solos en lo local.
Incluso con estos personajes y otros como los Charrez en Ixmiquilpan obtendrían más ayuntamientos de lo que ganaron en 2020, que fueron 4 en solitario y una diputación local en el distrito XVII, de Mineral de la Reforma, el actual presidente de la junta de gobierno del Congreso local.
El paso destructor de La Sosa Nostra por otros partidos
Con su incursión en el PT, el Grupo Universidad ha transitado por cinco partidos antes de llegar los partidos de la estrella: Partido Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN), MC y el extinto Social Demócrata.
De 1979 a 2018 el Grupo Universidad formo parte del tricolor, pues su líder, Gerardo Sosa renunció en ese año, pues el tricolor nunca lo expulsó pese a que operaba en otros institutos políticos. Por este partido fue tres veces aspirante a candidato a gobernador, además obtuvo diputaciones federales y locales para él y su grupo.
Del 2012 al 2016 el Grupo Universidad llegó a al Partido Acción Nacional (PAN) en los que obtuvo regidurías en Pachuca y Tulancingo, asimismo una diputación local. Luego, de 2016 al 2018 se fueron a MC en el que obtuvieron una diputación y presencia en cabildos.
Al abandonar MC se van a Morena y han logrado presencia en el Congreso local y federal, con más de 15 curules en el Congreso local y en el Congreso de la Unión.
Y es que en ese entonces la dirigencia del tricolor no expulsó al fundador de la agrupación, a pesar de que tras perder en 2005 ante Miguel Ángel Osorio Chong la candidatura priista a la gubernatura del estado, al exrector de la UAEH le otorgaron la presidencia de partido con lo que buscó colocar a sus cercanos y al tiempo buscó posiciones en otros partidos para miembros de su estructura.
“Como grupo, hemos sido un grupo de 38 años, gracias a Dios, y los 38 años no es nada más por buena suerte”, agregó Damián Sosa sobre su permanencia en la política hidalguense, en la que han saltado de partido en partido.